Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces", símbolo del sentido común, el coraje y la determinación, sabio ermitaño, leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.
Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la
Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la determinación, sabio ermitaño,leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.
Bonita forma de vida tejón y creo que la mejor para disfrutar de ella. Guapas fotos amigo de ese mar que se añora. Precioso mensaje le dejastes a Angelines. Buen domingo. Besos.
Al menos lo intento,Laura. Visité a Angelines muy de mañana y las palabras de Benedetti acudieron a mi y se las dejé tratando de infundir ánimo. Gracias por pasar. Un beso.
Dicen los japoneses que el rencor es una brasa encendida que llevamos entre los dedos para arrojarla a quien nos hizo daño en el momento justo... y que a veces el momento llega tarde o no llega. No lo dicen exactamente así... pero bueno. A mi también me gustaría vivir sin rencor, Tejón, te envidio, no me sale porque tengo muy mala leche y muy buena memoria, y claro, es díficil :D
Me encantan las fotos. Y Mila. Y tú. Besos pa´los dos
Pues no te quito la razón, a veces igual también es necesario un chasquido entre los dedos para salpicar esa brasa encendida. No me envidies, sin mala leche tampoco se puede vivir. Un beso. Ah y hoy llevé a Mila a caminar un poco, ha venido cansada pero le han encantado los rincones que la enseñé.
Una maravilla de las tuyas... Me quedo pensando en muchas cosas: en un poema de Margaret Atwood que leí hace poco. En personas que te miran y que te preguntan ¿por qué tanta empatía? y ¿por qué no odias a quien te odió? y en ave que un día vi varada en los Caños de Meca y a la que me acerqué, intentando salvarla de la marea. Miraba con algo de esos ojos que hoy tú traes aquí. Y ahora pienso en Pessoa: los animales saben más que nosotros. Saben lo que han de saber. Nosotros, no. He mezclado muchas cosas aquí pero es que tu entrada me ha dado para pensar en muchas cosas. Te mandaré por correo algunos de los enlaces a las ideas que han ido aflorando mientras te leía y veía tus espléndidas fotos. Siempre una alegría visitar tu tierra y tu mar, Tejón.
Una filosofía de vida que deja en paz con uno mismo. Las tempestades externas son inevitables. Las fotos son preciosas, los pájaros son mi debilidad. Muchos saludos, Jesús.
Es difícil vivir sin rencor, cuando te pasas la vida rodeado de tempestades y te toca recoger los vientos de las que tú no has sembrado.Preciosas fotos en las que se ve que el temporal ha amainado. Saludos
Preciosas imágenes y estupenda filosofía de vida, un tanto difícil pero no imposible de aplicar....pensándolo bien, el rencor produce más daño a nosotros mismos que a la persona que nos ofendió.
Bellas imágenes de la mar, esa mar que me guata tanto y que tanto bienestar proporciona.
Me pasa un poco como a Vega, que tengo demasiada memoria: de estar en los de Job montaría una marimorena de la que se escribirían coplas para los siglos venideros :) Pero, como Earl, "Intento ser mejor persona" e intento imitar a los que consiguen vivir en paz. Un abrazo, amigo
Pues sí, intentemos ser mejores personas, como Earl y descubramos el karma pero sin necesidad de que nos atropelle un coche,jjjjj. Otro para ti y los tuyos.
Eres todo un poeta. Que sí. Recoger tempestades de vientos que no sembramos debiera ser una alta aspiración del ser humano, pero creo que nos limitamos a dibujarlas con isobaras... o isóbaras que tanto monta. Las fotos son tiernas, será por el texto.
Alucinante entrada, tejón; vivo igual...Sí a la memoria, pero no con rencor, es muy mal compañero de viaje, un lastre vacío, y sólo se vive una vez, eso lo sabe bien esa preciosa ave, nada rencorosa de la tormenta:) Un beso muy grande
Nadie dijo que nuestro paso por la tierra resultaría fácil, tendremos que asumir como el vuelvepiedras que las tormentas nos van a acompañar en el camino y que de nada nos va a servir dejar que el rencor anide en nuestro interior. Un beso.
Yo soy como una ibermirga pero creo que tienes muchísima razón, no hay que desperdiciar ni una sóla neurona en ser rencoroso. Cuesta mucho trabajo estar perdiendo el tiempo en ello. Bastante es con asumir lo de cada uno. ¿Qué animalejos son esos? Le has retratados excelentemente. Salu2
Mejor guardar las fuerzas para otros menesteres. Por lo que dice Germán un poco más arriba el nombre común de esas aves es el de "vuelvepiedras", y acertado es pues da gusto ver la facilidad que tienen para hacerlo en los pedreros de la mar buscando alimento. Un saludo.
El rencor y sus amigos no son buenos compañeros de viaje ... tendríamos que seguir tu filosofía y dedicar nuestro tiempo en cosas que valgan la pena ... tus fotos me gustan mucho
Bonita forma de vida tejón y creo que la mejor para disfrutar de ella.
ResponderEliminarGuapas fotos amigo de ese mar que se añora.
Precioso mensaje le dejastes a Angelines.
Buen domingo.
Besos.
Al menos lo intento,Laura.
EliminarVisité a Angelines muy de mañana y las palabras de Benedetti acudieron a mi y se las dejé tratando de infundir ánimo.
Gracias por pasar.
Un beso.
Dicen los japoneses que el rencor es una brasa encendida que llevamos entre los dedos para arrojarla a quien nos hizo daño en el momento justo... y que a veces el momento llega tarde o no llega. No lo dicen exactamente así... pero bueno. A mi también me gustaría vivir sin rencor, Tejón, te envidio, no me sale porque tengo muy mala leche y muy buena memoria, y claro, es díficil :D
ResponderEliminarMe encantan las fotos. Y Mila. Y tú. Besos pa´los dos
Pues no te quito la razón, a veces igual también es necesario un chasquido entre los dedos para salpicar esa brasa encendida.
EliminarNo me envidies, sin mala leche tampoco se puede vivir.
Un beso.
Ah y hoy llevé a Mila a caminar un poco, ha venido cansada pero le han encantado los rincones que la enseñé.
Una maravilla de las tuyas... Me quedo pensando en muchas cosas: en un poema de Margaret Atwood que leí hace poco. En personas que te miran y que te preguntan ¿por qué tanta empatía? y ¿por qué no odias a quien te odió? y en ave que un día vi varada en los Caños de Meca y a la que me acerqué, intentando salvarla de la marea. Miraba con algo de esos ojos que hoy tú traes aquí. Y ahora pienso en Pessoa: los animales saben más que nosotros. Saben lo que han de saber. Nosotros, no. He mezclado muchas cosas aquí pero es que tu entrada me ha dado para pensar en muchas cosas. Te mandaré por correo algunos de los enlaces a las ideas que han ido aflorando mientras te leía y veía tus espléndidas fotos. Siempre una alegría visitar tu tierra y tu mar, Tejón.
ResponderEliminarGracias,Nuria por saber leerme tan bien.
EliminarUn abrazo.
Una filosofía de vida que deja en paz con uno mismo. Las tempestades externas son inevitables.
ResponderEliminarLas fotos son preciosas, los pájaros son mi debilidad.
Muchos saludos, Jesús.
Esas tempestades que no le dejan a uno estar en paz consigo mismo...
EliminarGracias y un abrazo.
Es difícil vivir sin rencor, cuando te pasas la vida rodeado de tempestades y te toca recoger los vientos de las que tú no has sembrado.Preciosas fotos en las que se ve que el temporal ha amainado.
ResponderEliminarSaludos
Es difícil pero hay que intentarlo,Pini.
EliminarMe alegro te gusten las fotos.
Un saludo.
y que bien se ve así la vida.... guapas fotos amigo. Un saludo.
ResponderEliminarSe que tu también lo intentas,amigo.
EliminarUn abrazo.
Preciosas imágenes y estupenda filosofía de vida, un tanto difícil pero no imposible de aplicar....pensándolo bien, el rencor produce más daño a nosotros mismos que a la persona que nos ofendió.
ResponderEliminarBellas imágenes de la mar, esa mar que me guata tanto y que tanto bienestar proporciona.
Besos
Eso pienso,Antonia, que nos puede hacer más daño.
EliminarUn abrazo.
Me pasa un poco como a Vega, que tengo demasiada memoria: de estar en los de Job montaría una marimorena de la que se escribirían coplas para los siglos venideros :) Pero, como Earl, "Intento ser mejor persona" e intento imitar a los que consiguen vivir en paz.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo
Pues sí, intentemos ser mejores personas, como Earl y descubramos el karma pero sin necesidad de que nos atropelle un coche,jjjjj.
EliminarOtro para ti y los tuyos.
Rancor é um sentimento que corrói por dentro de quem sente...vivemos em paz e com harmonia... graciosas fotografias, amigo Jesús...
ResponderEliminarUm beijo
Gracias,amiga. Vivamos en paz y armonía.
EliminarUn beso.
Eres todo un poeta. Que sí.
Recoger tempestades de vientos que no sembramos debiera ser una alta aspiración del ser humano, pero creo que nos limitamos a dibujarlas con isobaras... o isóbaras que tanto monta.
Las fotos son tiernas, será por el texto.
Un abrazo TyT
· LMA · & · CR ·
Estoy en el epicentro de una tempestad, maestro, y me estoy cansando de recogerlas.
EliminarMañana lo arreglamos con un poco de relanzón.
Un abrazo.
Preciosos esos vuelvepiedras!!! Un abrazo desde Castro.
ResponderEliminarMira tu por donde nos enteramos de como se llama el pajarillo.
EliminarGracias,Germán, cuánto sabes.
Un abrazo.
Alucinante entrada, tejón; vivo igual...Sí a la memoria, pero no con rencor, es muy mal compañero de viaje, un lastre vacío, y sólo se vive una vez, eso lo sabe bien esa preciosa ave, nada rencorosa de la tormenta:)
ResponderEliminarUn beso muy grande
Nadie dijo que nuestro paso por la tierra resultaría fácil, tendremos que asumir como el vuelvepiedras que las tormentas nos van a acompañar en el camino y que de nada nos va a servir dejar que el rencor anide en nuestro interior.
EliminarUn beso.
Yo soy como una ibermirga pero creo que tienes muchísima razón, no hay que desperdiciar ni una sóla neurona en ser rencoroso. Cuesta mucho trabajo estar perdiendo el tiempo en ello. Bastante es con asumir lo de cada uno.
ResponderEliminar¿Qué animalejos son esos? Le has retratados excelentemente.
Salu2
Mejor guardar las fuerzas para otros menesteres.
EliminarPor lo que dice Germán un poco más arriba el nombre común de esas aves es el de "vuelvepiedras", y acertado es pues da gusto ver la facilidad que tienen para hacerlo en los pedreros de la mar buscando alimento.
Un saludo.
El rencor y sus amigos no son buenos compañeros de viaje ... tendríamos que seguir tu filosofía y dedicar nuestro tiempo en cosas que valgan la pena ... tus fotos me gustan mucho
ResponderEliminarAbrazos
Si, hay mejores amigos y compañeros de viaje que el rencor.
EliminarGracias,Esmeralda.
Un abrazo.
Que maravilla Jesús Angel, son unas fotos preciosas. Un abrazo
ResponderEliminarGracias,lola.
EliminarUn beso.
Maravilloso tu blog !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarun abrazo desde una madrugada mas en mi vida
Agradecido por la visita.
EliminarUn saludo.