Me avergüenza a veces mi intención de juntar palabras.
Me avergüenza porque salen a borbotones
como sale el agua de un manantial donde nace un río
y tardan en encontrar el cauce que las conduce hasta el mar.
En el camino encontré, en la profundidad del bosque,
una "Belladona" que imploraba a los rayos del sol
que la dejasen escapar.
Para el fluir de las palabras y la música traigo hoy hasta mi cueva a dos mujeres palestinas.
Una poeta gazatí:
Hind Jouda
¿Qué significa ser poeta en tiempos de guerra?.
Significa avergonzarte de tu sonrisa, de tu abrigo,
De tu ropa limpia,
De tus horas de hastío, de tu bostezo,
De tu taza de café,
De tu sueño tranquilo,
De tus seres queridos que permanecen vivos.
Significa avergonzarte de tu gozo,
De que dispongas de agua.
Del agua limpia,
De tener al alcance una ducha,
La vergüenza de la casualidad de seguir vivo.
Dios, no quiero ser poeta en tiempos de guerra.
La música la pone:
Emel Mathlouthi


Tremendo. Si tienes un poco de empatía se te ponen los pelos de punta.
ResponderEliminarUn saludo.
No entiendo que haya gente que no se conmueve.
EliminarSaludos.
Me he quedado sin palabras, tanto con el poema como la canción. Un saludo.
ResponderEliminarGracias, Segundo.
EliminarUn saludo.
Cuando las cosas se hacen mal desde un principio salen de esa manera, si en el 48 se hubieran fijado unas fronteras creo que la historia fuera diferente.
ResponderEliminarCreo que los pueblos semitas son los descendientes del hijo de Noe llamado Sem o eso entiendo que dice la Biblia y entre esos pueblos creo esta el palestino, al igual que los descendientes de Jacob (Israel). Por lo tanto al ponerse del lado de los palestinos no se puede llamar a una persona antisemita.
Si tu poesía me parece de gran sentimiento, la poesía y canción de estas dos mujeres palestinas son de poner los pelos de punta.
Saludos.
No puede acabar bien lo que mal empieza.
EliminarSaludos.
No conocía a esa poeta ni tampoco a la cantante, preciosos ambos. Cuanta crueldad en el ser humano, como se puede ser indiferente a esta monstruosidad que me niego a llamar guerra.
ResponderEliminarUn abrazo.
A las dos las descubrí en el programa de Radio3 Mediterráneo.
EliminarUn abrazo, Carlos.
No se qué decir...
ResponderEliminarEs demasiado terrible reconocer que el maravilloso poema que compartes ( por supuesto el tuyo tb ) es muy cierto,
la voz de esta mujer abolutamente preciosa y la imagen .. Todo. Todo aquí es belleza, si no fuera porque habla de tantísimo dolor.. Un abrazo muy fuerte
La dedicatoria a Elia tb es un bellísimo detalle ¿qué mundo les dejamos a nuestros niños? ...
Ojalá ellos sepan hacerlo mejor que nosotros. Ojalá, al menos tengan la posibilidad. Mil gracias!
Las imagenes que vemos a diario soportando toda clase de penalidades tendrían que hacernos reaccionar pero ni así, no hay piedad en el mundo y mal futuro les dejamos.
EliminarUn abrazo, María.
Antes de emprender la guerra, hay que ver las posibilidades que existe de lograr la paz. La guerra no trae consigo nada más que sufrimiento y destrucción.
ResponderEliminarUn abrazo.
Quienes emprenden las guerras no van al frete de batalla, Antonia.
EliminarUn abrazo.
Sin palabras me quedé... puro sentimiento a borbotones
ResponderEliminarGracias Vera por tu sensibilidad.
EliminarSaludos.
Emocionante tu manera de traer de manera tan bella a nuestra consideración este drama que lleva consigo tanto dolor.
ResponderEliminarMuy emotivo.
Gracias.
Tu sensibilidad no puede dejarte indiferente a tanto dolor.
EliminarUn abrazo.