Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces", símbolo del sentido común, el coraje y la determinación, sabio ermitaño, leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.

Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la

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Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la determinación, sabio ermitaño,leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.

28/11/11

EL CAMBIO CLIMÁTICO

Esta fotografía deja bien claro a quienes todavía muestran dudas sobre la veracidad del cambio climático, que es evidente el calentamiento global a la vista de como se ha ido reduciendo la tela necesaria para combatir el frío, y consecuencia de ello es también el incremento del paro y los EREs ( Expedientes de Regulación del Empleo) en el sector textil.

24/11/11

FRAGILIDAD


Mañana ya la sangre no estará
Al caer la lluvia se la llevara
Acero y piel combinación tan cruel
Pero algo en nuestras mentes quedara

Un acto así terminara
Con una vida y nada mas
Nada se logra con violencia
Ni se lograra
Aquellos que han nacido en un mundo así
No olviden su fragilidad

Lloras tu y lloro yo
Y el cielo también, y el cielo también
Lloras tu y lloro yo
Que fragilidad, que fragilidad.

Sting, escucharlo aquí.

19/11/11

MAR DE FONDO

Estoy reflexionando y pienso: A partir de mañana,
¿se despejarán los cielos y lo veremos todo más azul?.

Este pensamiento me lleva a los versos de Jesús Cancio.

MAR DE FONDO

¡Maldita mar de fondo;
maldita mar, que sabes
a futuras galernas
o a muertas tempestades:
el nervioso rumor de tus espumas,
tu sonoro vaivén, hiela mi sangre.


LATIDOS DEL ALMA

¿Te acuerdas de aquel día que enterramos
la primera ilusión?
Viendo que tú llorabas sin consuelo,
desesperado y loco, lloré yo.
El palpitante fuego de tus ojos
tu llanto traspasó,
y en mis rabiosas lágrimas ardía
como en las aguas de la mar el sol.

15/11/11

PAISAJE VEGETAL

¿Donde Viven?
Entre grietas y rocas,
agarrándose a la vida,
aprovechando cada gota.

11/11/11

LOS PICOS Y EL MAR

Hace millones de años emergieron del mar,
las olas siguen saltando queriéndolos abrazar.

7/11/11

EL SECRETO MEJOR GUARDADO

Lo autentico, donde nada cambia, aquí todo permanece igual que hace cientos de años, una geografía dura que ha labrado el carácter de los pasiegos, en armonía con la naturaleza.
Aquí la historia no se guarda en archivos, está escrita en las piedras, en la madera y en las arrugas de la frente de Sebio.
Sale Sebio por la puerta de la casa y en sus encallecidas manos lleva un caldero de zinc con pienso para el ternero, en la cabeza lleva calada una boina y calza en sus pies unos chanclos de goma.

"Mi padre si viviera tendría hoy ciento quince años, cuando él nació la casa ya estaba aquí y antes que él ya habían nacido aquí sus abuelos y bisabuelos, echando por lo bajo la casa tiene trescientos años.
Murió muy joven mi padre, quedó mi madre sola con doce hijos y trabajó duro "pa" sacarnos a todos alante, ninguno salimos descarriado.
Veinticuatro vacas cabían en la cuadra y con ellas hacíamos hasta los pastos más altos la muda todos los veranos, en el invierno, guardadas en la cuadra eran la calefacción de la casa.
Leche, huevos patatas y borona nunca faltaron.
La semana pasada vendí en la feria en Torrelavega una vaca de leche y me dieron por ella cincuenta mil duros, pero esto hoy ya no lo quiere nadie, marcharon todos, unos a Renedo, otros a Sarón, pero no se si no tendrán que volver, que los trabajos se han puesto muy mal y los bancos están quedando con los pisos"...

Allí se quedó Sebio, escuchando el silencio interrumpido por el agua del río.


3/11/11

LA OJERADA

Me preguntaba hace unos días mi paisano Fermín, si aún me quedaban en Cantabria lugares por descubrir.
La respuesta está aquí, en este acantilado muy cerca del Faro del Cabo de Ajo.

La gente del pueblo lo llama "la ojerada" aunque hay quien lo llama "las gafas del mar" y es una magnifica ventana por donde asomarse al Cantábrico.
Si no estás advertido te puedes llevar un buen susto pues en los días de temporal, cuando la mar se enfada sale bramando con la fuerza de un volcán por entre las agrietadas rocas del acantilado, lanzando con fuerza convertida en espuma el agua salada.

Es un lugar muy frecuentado por los aficionados a la pesca con cañas y por rebaños de ovejas que mansamente pacen a la orilla del mar y que usan como redil en las noches la cueva de "la ojerada".