Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces", símbolo del sentido común, el coraje y la determinación, sabio ermitaño, leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.

Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la

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Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la determinación, sabio ermitaño,leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.

24/5/11

SOMOS COMO LOS ÁRBOLES















Como los árboles a la orilla de un río o al borde del mar, prisioneros de la tierra y de las rocas, tenemos miedo de lanzarnos a la corriente y navegar en libertad.


Y envidiamos a las ramas más altas que aunque saben que nunca alcanzaran el cielo ni tocaran las nubes, serán acariciadas por los vientos, recibirán las gotas de lluvia y los rayos del sol, sus hojas se rozaran, se besaran sin importarles lo que piensen el tronco y las raíces.Ese tronco y esas raíces que han hecho posible que sean libres a costa de estar ellos cautivos y anclados en la tierra.

Alcanzada la plenitud buscaran una puerta camuflada que les haga volver al interior del árbol o se quedaran fuera formando con las hojas un tapiz en el suelo.

21/5/11

MENOS MAL QUE ATÉ LA BICI



Si no la llego a atar, me la roban.

17/5/11

DE COVADONGA A PONCEBOS



Os invito a que me sigáis en esta bonita travesía que discurre desde el lago Ercina para bajar por la canal de Culiembro y continuar por la senda del Cares hasta Poncebos.

Por el mismo camino que según cuenta la historia huyeron los moros tras la batalla de Covadonga, dejando atrás lo que hace miles de años eran glaciares y nieves perpetuas y hoy es un tapiz de colores, vegas y majadas habitadas por pastores.

Veinte kms de recorrido con fuertes desniveles de bajada.






































¿Cansados?. A mi me duelen un poco las rodillas y las plantas de los pies pero no quito las imagenes de mi cabeza.

11/5/11

EL SERBAL DE LOS CAZADORES



El atractivo que ejerce sobre los pajaros este árbol hace que sea muy apreciado por los cazadores y a eso debe su nombre.

Es una especie en recesión y escasea bastante.

Yo me los suelo encontrar diseminados por los montes que pateo y siempre me sedujo igual que a los pájaros.

Un día me encontré un ejemplar pequeñito en una braña y pensé que antes que lo paciese una vaca o un caballo estaría mejor en mi casa.

Durante años ha ido creciendo y recibiendo mis cuidados, cambiandolo de maceta según lo iba requiriendo y este año me lo ha agradecido floreciendo de forma tan espectacular.

A su alrededor se percibe un aroma tan agradable que no es de extrañar que se llene de abejas y demás insectos que vienen en busca de su nectar.

Podeis haceros idea de lo que me alegra salir a la terraza y disfrutar con su presencia.

Solo espero que la flor se convierta en fruto y que unos ramilletes de bolas rojas me alegren en otoño.

Las flores se suelen utilizar para fabricar una bebida calmante que se consume como una especie de té. Sus frutos sirven para preparar una bebida alcohólica. Este árbol también se suele utilizar para afianzar suelos inestables en las cuencas torrenciales, dada la fortaleza y penetración de sus raíces y la facilidad que tienen para rebrotar de cepa y raíz.

6/5/11

CAPEANDO EL TEMPORAL










Firmes como las rocas hay que aguantar,

los embates de la mar.

Ni el viento, ni las olas, ni las resacas,

nos pueden derrotar.

3/5/11

PUERTO DE SAN GLORIO




Segundo intento. El año pasado la niebla nos hizo bajarnos a mitad del puerto y hacer una ruta alternativa. Este año el tiempo no está mejor pero nos arriesgamos y aquí estamos, a 1600 metros de altitud con niebla y nubes amenazantes, hoy me parece que no vemos el sol,fosi.



Si miramos para Cantabria vemos como se elevan las nubes desde el fondo del valle de Liebana, y por la cara de León los picos llevan la boina puesta.





De frente tenemos el Pico Robadorio también cubierto de nubes, apenas nos bajamos del autobús y nos encaramos con él, tenemos por delante un duro ascenso continuado de 700 metros aproximadamente, la ruta está señalada con una dificultad alta y por una vez creo que no nos han engañado.

El poco rato que las nubes dejan pasar al sol nos permite ver el fondo del valle y los pastos de Llanave de la Reina y algunos neveros.

La ascensión continua siendo dura y pasamos por terrenos angostos y con mucha piedra suelta, la niebla por momentos se va espesando para convertirse en lluvia y tenemos que sacar de las mochilas capotes y paraguas.



Hemos comenzado a andar a las once y media de la mañana y en poco más de hora y media hemos alcanzado la cota más alta del recorrido, estamos a 2.222 metros de altitud. Desde aquí se suponía que disfrutaríamos de unas maravillosas vistas de Liebana, solo vemos nieve y niebla.

Los más rezagados van llegando espaciadamente a la cima pasando por encima de lo que según algunos investigadores pueden ser los restos de una fortificación defensiva de hace más de 2.000 años durante la ocupación romana y la lucha con las tribus cántabras. Hallazgos recientes pendientes de investigación así lo parecen confirmar.
También quedan vestigios de la guerra civil que demuestran el interés estrategico de el lugar.

Después de hacer cima, comienza el descenso hacia el collado, continua lloviendo y las manos se me han quedado frías como la nieve, casi no atino a disparar para sacar las fotografías.

Llueve cada vez con más fuerza, (ampliando la foto lo podéis ver) y pasamos por encima de los neveros.



La aparición ante nuestros ojos de los pastos de Riofrio compensa las dificultades que hemos pasado hasta llegar aquí, ha parado de llover, parece que hemos encontrado un trozo del paraíso, seva.

Peña Prieta que antes se nos mostraba tímida entre las nubes aparece majestuosa como queriéndonos invitar a subir a su cima, total solo son 300 metros más de altura pero habrá que dejarlo para otro día.

En el refugio no cabemos todos a la hora de comer y cada uno se apaña como puede, el botellín de vino y el bocadillo me quitan el frío de las manos.


Nos espera un vertiginoso descenso de 1500 metros de desnivel, por una pista que nos adentrará en un espeso bosque de hayas y robles.El año pasado se vio al oso por estos parajes, hoy con lo que llueve no creo que salga de la osera.

Seguimos pescando la niebla casi con las manos,ñOCO.


En el fondo del barranco y escondido entre los árboles se oye el río vimos nacer en la falda de Peña Prieta.

Tirando de "zoom" parece que ya está más cerca el pueblo de Ledantes.

El invierno ha sido duro pero aún queda leña.

El día ocho, si alguno se ánima podéis subir por una buena causa. En este lugar privilegiado quieren hacer una estación de invierno, mejor sería si hicieran una de tren.