Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces", símbolo del sentido común, el coraje y la determinación, sabio ermitaño, leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.

Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la

Mi foto
Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la determinación, sabio ermitaño,leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.

30/11/10

LA NOVIA DEL MAR

Esta tarde he estado en Santander y he aprovechado para sacar unas fotos a la que dicen que es una de las bahías más bellas del mundo.
Así lucía Puerto Chico con las montañas nevadas al fondo.
Y un poco más adelante, "Los Raqueros", un conjunto escultórico de los más fotografiados.

Un poco de su historia sacado de la Wikipedia.
La palabra raquero (< inglés wrecker ['ladrón de barcos, saqueador de naufragios']; según otros: < latín rapio-is ['arrebatar, arrastrar, llevar violenta o precipitadamente']) designa a los niños marginales, huérfanos o de extracción humilde, que frecuentaban los muelles de Santander (Cantabria) durante el siglo XIX y principios del XX sobreviviendo de pequeños hurtos y de las monedas que los pasajeros y tripulantes de los barcos arrojaban al mar para que las sacasen buceando.
Según los habitantes de esta zona de la ciudad, el nombre de los raqueros se deriva del apelativo aportado por los tripulantes y pasajeros de los barcos ingleses en los que robaban, pronunciado castellanizado como raquers. Con el tiempo, estos niños llegaron a ser una atracción. Pescaban y pasaban el día en el muelle, bañándose generalmente desnudos o semidesnudos. La gente les tiraba monedas ("perras") al agua para que las sacaran buceando, y se les pagaba por rescatar cosas que caían desde el muelle, como sombreros, alpargatas, etc.




Santander, eres novia del mar
Que se inclina a tus pies
Y sus besos te dá.
Santander,las estrellas se van
Pero vuelven después
En tu cielo a brillar.
Yo también, dejaré tu bahía
Y un recuerdo en mi vida
Que jamás borraré.
Santander, al marchar te diré
Guarda mi corazón,
que por el volveré.
Santander, las estrellas se van
Pero vuelven después
En tu cielo a brillar.
Yo también, dejaré tu bahía
Y un recuerdo en mi vida
Que jamás borraré.
Santander, al marchar te diré
Guarda mi corazón,
que por el volveré.
JORGE SEPULVEDA.

26/11/10

ENTRE LA TIERRA Y EL CIELO










A esta ventana envuelta de misterio,
donde el viento silba al pasar,
donde se juntan los colores,
donde se unen cielo y mar,
donde los rayos chocan contra el suelo.
A esta ventana me he de asomar.

24/11/10

ELEVEN. LOS ULTIMOS CORSARIOS...


....así se titula el ultimo libro que he leído.
La foto que encabeza esta entrada es una ventana de la Biblioteca Municipal de mi pueblo ( Polanco), la sacó María, la bibliotecaria y me la prestó.
Solo por el paisaje que se ve desde el interior merece la pena visitar esta biblioteca, desde hace unos días cuenta con un atractivo más pues entre los libros de préstamo, se encuentra el que mi buen amigo José me regalo.

Este libro está lleno de historias y aventuras, que no hubieran llegado a buen termino de no ser por la colaboración de uno de sus personajes, José Alcántara, "El Poeta".
El libro ya no está en la balda donde le saqué las fotos pues me consta que está teniendo buena aceptacion. Espero que llegue al mayor numero de lectores posibles. Merecido lo tiene su autor, Pedro Cirauqui del que os dejó una reseña publicada en El Diario de Navarra para que veáis las dificultades que encontró para su publicacion.

No es escritor. Ni siquiera aficionado a la lectura, pero el olitense Pedro Cirauqui Busto ya tiene en las librerías su primera novela: Eleven. Los últimos corsarios. Ambientada en el siglo XIX, entre sus protagonistas está Francisco Javier Mina, el héroe de la guerrilla navarra contra los franceses que murió luchando por la independencia de México. "No es una novela histórica", advierte Cirauqui.
Actualmente reside en la localidad guipuzcoana de Legazpi, donde es propietario de una tienda de electrodomésticos, pero los fines de semana los pasa en Olite.
Un día, les dijo a los seguidores de su blog que iba a escribir un libro y se le había ocurrido utilizar sus nombres de usuario para identificar a los personajes que apareciesen en él. "Me ha llevado dos años y medio de trabajo, porque sólo podía escribir por las noches". Asegura que ha escrito la novela de forma improvisada: "En principio iba a ser una aventura de corsarios, luego decidí incluir a Mina, porque el personaje me encanta. Luego tuve que unir a los corsarios con los guerrilleros navarros". El título del libro, Eleven, se refiere al nombre del navío corsario.
Cuando terminó la novela, fue a la imprenta, pidió presupuesto y mandó publicar 525 ejemplares. "Me ha salido bien, porque he podido recuperar la inversión realizada", comenta satisfecho. Así de sencillo. Reconoce que la vocación de escritor le persigue desde hace 25 años. "Se me ocurrió una idea, pero sólo escribí un folio". Ahora está trabajando en su segundo libro, que tendrá como protagonista a un inmigrante de Pamplona que lo deja todo para irse a vivir a Australia.
NEREA ALEJOS . PAMPLONA Lunes, 6 de septiembre de 2010

21/11/10

PUEBLOS OLVIDADOS

En las ultimas semanas ha vuelto a saltar a las portadas y a los informativos de televisiones y radios, el conflicto del pueblo saharahui y la lucha por sus derechos que ya dura treinta y cinco años.
Pero hay más, son demasiados los pueblos que todavía en estos días siguen reclamando tierras, derechos y libertades.
En Colombia, los pueblos indígenas han sido obligados a participar en un conflicto armado que dura ya cuarenta años y por negarse son asesinados o expulsados de sus tierras.
En Perú, los pueblos indígenas amazónicos luchan contra la promulgacion de leyes que atentan contra los bosques tropicales permitiendo la tala y deforestación de los territorios a los que pertenecen.
Sirva esta introducción para hablaros de la exposición de fotografías que José Eduardo Lamarca ( Pepe ) vecino y amigo realizó el pasado mes de Octubre en la sala Robayera de Miengo y donde nos mostró un trabajo bien hecho, directo, de los que llegan al interior y no dejan a nadie indiferente, con una gran carga de sencillez y humanidad como la que me muestra cada día cuando me cruzo con él en la escalera.
En sus retratos no hay engaño, en ellos se ve un mundo que existe, es real, está ahí cada día con toda su dureza, pero que no queremos ver. No queremos ver a quienes desempeñan los oficios más ingratos y miramos para otro lado cuando vemos quien recoge cada día nuestras basuras.

Pepe retrató la fiesta que el pueblo Mapuche organizó al ministro del Gobierno de Allende cuando devolvió las tierras que pertenecían a los Mapuches.
.El pueblo Mapuche nunca ha aceptado dominación alguna, no fue sometido ni por los conquistadores españoles y gozó de autonomía hasta finales del siglo XIX cuando por la vía armada fue privado de sus tierras y sus derechos por los gobiernos de las repúblicas de Chile y Argentina.
Y de nuevo hemos vuelto a mirar para otro lado.


El Régimen Militar de Pinochet volvió a requisar de forma cruenta las tierras Mapuches y se cuentan por cientos las personas que fueron desaparecidas y torturadas.
Y ahí sigue este pueblo luchando y reivindicando sus tierras y sus derechos, y ahí seguimos mirando para otro lado cuando gobiernos democráticos están aplicando leyes que promulgó la dictadura y que aún no se han derogado.

Aquí dejo este enlace para que conozcáis un poco más a Pepe. Seguro que no os defraudará este argentino con el que tan buenos momentos he compartido y pienso seguir compartiendo.

18/11/10

OTRA VEZ EL MAR....


....se ha vuelto a enfadar.
Los pescadores han tenido que amarrar los barcos en el puerto y no pueden salir a faenar.
Pero el mar siempre generoso, ha ido depositando en las arenas de las playas un tesoro de color rojizo, arrancándolo de sus propias entrañas a más de 25 metros de profundidad.

La "caloca" es un alga que llegado el otoño, desde el mes de octubre hasta el mes de febrero es una fuente de ingresos para muchas familias que viven cercanas a la costa y que no sin grandes y mal pagados esfuerzos, muchas veces lloviendo y granizando se dedican a sacar del mar las algas, para extenderlas por los prados y ponerlas a secar.
Antiguamente los campesinos las utilizaban como abonos y fertilizantes para sus campos y usaban bueyes y carretas para recolectarlas, hoy se hace de forma mas mecanizada y su utilidad es distinta pues se emplea en productos farmaceuticos y alimentarios, siendo muy valorados sus ingredientes, sanos y naturales.


Las fotos son de esta tarde.



Mila me decía: ¿"Pero a donde vas? ¡¡No te acerques más!!!

Las gaviotas no me avisaron....

.....no la vi llegar....

.....y acabé como tenía que acabar.

Viniendonos para casa para ponerme a secar, allí se quedaron las olas incansables , venga saltar y saltar.
Mila de reír aún no ha podido parar.

15/11/10

TEJEDA DE TOSANDE




No voy a dar muchas pistas de donde estuve ayer, pero no puedo evitar enseñaros un lugar lleno de magia y encanto.

A unos cinco kilómetros de Cervera de Pisuerga, dentro del Parque Natural de la Montaña Palentina y Fuentes Carrionas, (podían abreviar el nombre pues parece un testamento) y partiendo de un pueblo que se llama Dehesa de Montejo, una senda preciosa como la que se ve en la foto de abajo,nos lleva hasta la tejeda de Tosande, una de las mejor conservadas de la península y con mayor numero de tejos centenarios, más de setecientos catalogados en formacion boscosa, cosa singular pues el tejo es un árbol que se desarrolla de forma aislada e individual.



Me levanté temprano y muy ilusionado para preparar la mochila, la bebida y los bocadillos, ya la noche anterior lo había dejado más o menos todo organizado pero me gusta hacer las cosas con tiempo, no se me vaya a olvidar algo.

El día amanece nublado y hace viento, me asomo a la ventana y comienza a llover. No quiero echarme atrás, me animo pensando en una frase que oí hace tiempo, " Para que queremos una vida eterna si cuando llueve un domingo no salimos de casa".

Continuo los preparativos, coño, con este frío habrá que llevar el gorro de lana y la braga para el cuello,¿ como hago yo ahora para sacarlos del armario sin despertar a Mila?.



Primer intento, entro en la habitación medio a oscuras, abro con cuidado los cajones del armario, nada, que no aparecen por ningún sitio. Abandono, ¿por que será que los hombres nunca encontramos lo que buscamos en los armarios?

El caso es que si hace mucho frío, con el poco pelo que tengo y sin gorro se me van a helar las orejas.

Segundo intento, vuelta a la habitación, enciendo sin meter ruido la luz de la mesita y se oye decir, ¿que buscas?, vaya cuanto lo siento, ¿te desperté? Es que no encuentro el gorro de lana, ¿has mirado ahí? (señalando con el dedo) Efectivamente, allí estaba.



Creo que lo tengo todo y salgo en busca del autobús. Cuando hora y media después llegamos al punto donde comienza la ruta hace un aire fresco, me pongo el gorro y la braga al cuelo y.....maldición, se me olvidaron los guantes, pues nada habrá que meter el bastón en la mochila y las manos en los bolsillos.




El día como muy bien sabe Fosi, cuando sale el tejón, despeja, y casi hace para pantalones cortos.
Pasamos por robledales cubiertos de un liquen que se conoce como "barba de monje"y se genera una pequeña discusión pues hay quien dice que este seca el árbol y yo sostengo que no.
Consultamos al guia y nos saca de la duda. Este liquen solo se da en ambientes donde el aire es extraordinariamente puro y no perjudica para nada a los árboles donde se desarrolla.



Este pequeño tejo se encuentra a la orilla del sendero, es el primero que vemos pero creo que se merece una foto.Iremos viendo algunos más dispersos por el bosque y ocultos entre los acebos pero nada nos hace sospechar lo que veremos al final de la escalera que se ve en la foto de abajo.

Entramos de pleno en un mundo lleno de magia y de misterio, disfruto más cuando retornamos. Me quedo el último para entrar en contacto de una forma casi espiritual con estos árboles que viven agrupados como si quisieran defenderse de los posibles ataques de quienes piensan que estos sitios bien pudieran estar urbanizados para permitir el acceso masivo de gentes que pisan, trepan, manosean y dañan las cortezas de estos frágiles ancianos....


...de por si bastante acosados por las hayas invasoras que cada vez acotan más su espacio y por los animales que ramonean y pacen los brotes más tiernos dificultando la conservacion y el crecimiento de los ejemplares más jóvenes.




El trayecto de vuelta lo hacemos pasando por zonas de pasto y aún se pueden ver los colores otoñales en todo su esplendor en las masas de hayas que no terminan de desnudarse y encinas que crecen sobre las rocas calizas.
Todo nos parecería más alucinante si nos lleváramos al estomago algún mongui alucinógeno de los que había por el camino.



Pasamos a otro valle ya cerca del pantano y el pueblo de Ruesga.
Hay bastantes ejemplares de enebro espinoso, árbol de lento crecimiento, de bajo porte y leñoso de cuyo fruto destilado se saca el aroma de la ginebra. Cogiendo el fruto y apretándolo entre los dedos hago escapar su embriagador olor.



Más prados, este bonito mastín abandona su rebaño para seguir el nuestro buscando zalamero carantoñas y cuando me acerco se tumba para que le rasque la panza. Si no fuera tan grande...





Estamos llegando al final, al fondo vemos el Parador Nacional de Cervera de Pisuerga, al lado del pantano nos espera el autobús.

He pasado un día extraordinario y me he acordado de muchos de vosotros.
De Fermín, espero que esta entrada le haya gustado más que la ultima que hice sobre el mar.
De Carzum y de Marce, no pudimos visitar el Museo Etnográfico de Piedad Isla pues estaba cerrado.
De Transi y Arena porque se que apreciaran los colores del otoño.
De José Manuel porque pensará que estoy un poco loco.
De seva, ñOCO, Logio y Xibeliuss porque ellos hubieran sacado mejores fotos.
De Anjana y Anjanuca porque seguro que si van ellas se encuentran con algún duende.
De José y Luisa María.
De Lito para que se de una vueltuca fuera de la costa.
Almalaire si viene se nos queda en una cueva.
De José Antonio y su pierna rota.
Y de muchos más...

11/11/10

LAS HUELLAS DEL TEMPORAL


"Tras la tempestad llega la calma". "Nunca llovió que no escampó".
Estos refranes bien se pueden aplicar, pasado ya el azote del temporal. Es el momento de hacer balances y calcular los daños económicos, afortunadamente en Cantabria no hubo que lamentar desgracias personales.
Hoy hemos estado caminando por la playa de Liencres y esto es lo que hemos visto.

De entrada nos sorprendió ver a gente que llevaba mallas con percebes recogidos en la arena que fueron arrancados de las rocas por la fuerza de las olas. Nunca creo que se encuentren más baratos.
Montones de erizos de mar sin púas y pulidos, semillas de todo tipo de árboles arrastradas por los ríos, nueces, avellanas, bellotas...ramas y árboles enteros, arrancados por la riada de raíz.





Las olas rompieron las montañas dunares en varios puntos, permitiendo la entrada del mar en zonas que estaban a salvo de las mareas.

Por aquí entró y a su paso dejó todo llano como la palma de la mano.



Arrancó todo el vallado que separa la playa de la zona de protección vegetal de las dunas.



Estas son son algunas de las huellas del temporal.