Salían por la chimenea espirales de humo
que impregnaban el aire de aromas de leña.
El frío era tan intenso
que entumecía los huesos.
Tras el cristal que con su propio aliento desempañaba
estaba él.
Tenía una mirada triste,
lánguida, como de cautivo,
como de esclavo en la bodega de un barco.
Me consolaba pensar que su encierro era voluntario,
pero en sus apagados ojos leí:
¡¡¡Que vengan a por mí!!!
Me deleitan tus palabras que se mueven como el agua de algo que nunca existió
ResponderEliminarMuchas gracias por tan amable comentario.
EliminarPasan los días, pasan los mese y pasan los años y nadie lo recata de esa mísera existencia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Triste es vivir en cautividad.
EliminarUn abrazo.
Un bonito poema al gato que curiosea lo que pasa por la calle.
ResponderEliminarSaludos.
Seguro que le gustaría más curiosear por las calles que detrás de los cristales.
EliminarSaludos.
Al margen de lo evidente -que son preciosas tus letras- podrían ser intepretadas de mil maneras, seguramente porque te acabo de leer allí, hasta podría referirse a tu padre - siento muchísimo su final, pero debió hacerte sentir de maravilla que tú estuvieras allí, a su lado- o ya ...haciendo un doble salto mortal a todos, tras el cristal que empaña cada uno, este frío y lo convulso de todo lo que ocurre a nuestro alrededor, poniendo en relación tu poema con este tema - siempre me soprendes con lo que cuelgas, me ha gustado mucho- y... que vengan a pòr todos ; )
ResponderEliminarMil gracias, abrazo fuerte!!
Buena interpretación has hecho de mis palabras...su cautiverio fue largo, triste y doloroso, y un año más llega su aniversario.
EliminarUn abrazo, María.
Com certeza um belo poema;
ResponderEliminarMas essa janela pintada de verde está linda a imagem.
Prazer em conhecer seu blog.
Me encantan esas ventanas con colores apagados.
EliminarGracias por pasar y comentar.
Dulce poema. Ojala no este mucho tiempo solo el gatito. Te mando un beso. Enamorada de las letras
ResponderEliminarMe alegro te hayan gustado mis letras.
EliminarUn saludo.
Bonito y emotivo poema. El tema musical, precioso
ResponderEliminarSaludos
Gracias Pini.
EliminarUn saludo, amigo.
Siempre es un placer visitarte.
ResponderEliminarUn bellísimo poema y un tema musical precioso.
Posees una mirada y un interior, capaz de atrapar lo importante.
Gracias.
Siempre es un placer leer tus amables comentarios, Maripaz.
EliminarUn abrazo.
Querido tejón es precioso y la foto maravillosa. Me encanta. Un enorme abrazo.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Lola.
EliminarUn beso.
Me ha recordado a la película Amour. El cuidado entre mayores. La enfermedad, el ocaso de los días... Una noticia reciente ocurrida en Oroso (A Coruña).
ResponderEliminar¿Quién sabe qué ocurre tras las ventanas?...
Preciosa fotografía. Y metáfora.
Esconden tantos secretos las ventanas y encierran tantas miserias...y sin poder ayudar.
EliminarUn saludo, Campurriana.
Bellísima foto y precioso texto. Es el invierno. Saludos.
ResponderEliminarMe alegra verte por mi cueva, Sara.
EliminarUn abrazo.