Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces", símbolo del sentido común, el coraje y la determinación, sabio ermitaño, leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.

Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la

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Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la determinación, sabio ermitaño,leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.

26/6/09

MAESTRA RURAL


Esta semana se ha inaugurado en los jardines del Centro de Recursos, Interpretacion y Estudios de la Escuela, el monumento a la maestra rural.
La escultura es obra de Lucio de la Fuente, maestro docente jubilado y escultor.
En actitud protectora y cariñosa se ve a una maestra y a tres alumnos, desempeñando un trabajo que contribuyó a aumentar las cifras de escolarización y alfabetización, en la Cantabria del siglo pasado.
Siempre se ha representado la figura masculina del maestro y este monumento es el único en Cantabria, (y posiblemente en España) donde es una mujer la que ejerce de maestra, en unos años en los que ser maestra era la única profesión socialmente admitida.
Me viene a la memoria el recuerdo de una amiga, maestra en uno de los pueblos más altos de la región, que subía los lunes y volvía a su casa con los suyos los viernes, si el tiempo no lo impedía.
En aquellas escuelas rurales, pequeñas, humildes, en ocasiones eran los maestros y las maestras los encargados hasta de proporcionar la leña, para que los alumnos no pasaran frío en el crudo invierno.
Maestros y maestras que con pocos medios y mucha dedicacion y entusiasmo, hicieron despertar la curiosidad por la vida y por el mundo a sus alumnos.
Uno de estos maestros habría querido para mi, pero lamentablemente no fue así. A mi me tocó un maestro de los del"régimen", de aquellos de los de, "la letra con sangre entra".
Eramos los alumnos los que teníamos que llevar la leña a la escuela para que se calentase el maestro y a nosotros nos calentaba a base de "leña", con aquellas reglas de madera que lo mismo servían para calentar las manos, que para hacerte la raya al medio y estar todo el día bien "peinaos", si nos daba con ella de canto en la cabeza.



MAESTROS ENTRAÑABLES



10 comentarios:

  1. Buff pues lo cierto es que yo he escuchado más historias como la tuya, que como la que representa la escultura.Pero bueno, de todo habría imagino yo...
    Ahora por lo visto son los alumnos los que "reparten leña" no? (en vista de las noticias de hoy en dia...)
    un saludo!

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  2. Pues si Diana, esto parece el mundo del revés,el carro se ha puesto delante de los bueyes,y no se cual es la solucion,pero no es bueno ni lo uno, ni lo otro.
    Gracias por la visita y un saludo.

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  3. Buenas, Tejón:
    Hace unos años, la escuela en la que trabajo, celebraba su 25 aniversario. Invitaron para la ocasión a una gran pedagoga, en su discurso pronunció una frase que ya nunca se ha borrado de mi recuerdo: Quien tiene recuerdos de escuela, es seguro que esta fue amable, sugerente, educadora, quien no recuerda su escuela, seguro que fue gris. Yo tengo pocos recuerdos, tan solo al sabio Don Manuel, que se esforzaba porque los niños hospitalizados en Santa Clotilde no perdiésemos comba.
    Esta bien que se reconozca el esfuerzo de aquellas mujeres que aportaron tanto a los niños de esa tierra agreste y difícil, en aquellos años, que es la nuestra, creo.
    Por cierto hacia mucho tiempo que no escuchaba a Pachi Andión, buena elección para ilustrar la entrada.
    Abrazos desde el Mediterráneo.

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  4. Hola Fermin,yo tambien soy partidario de quedarme con los buenos recuerdos, pero de Don ....(no quiero dar su nombre)bueno no me queda ninguno.
    De donde si me queda buen recuerdo es de el hospital de Santa Clotilde, pues siendo muy niño me llevó mi madre a visitar a un primo que estaba hospitalizado, y quedé impresionado de las vistas que tenía desde allí el puerto de Santander.Estuve todo el tiempo pegado a la ventana y creí poder tocar los barcos con las manos.
    Un saludo desde el Cantabrico en calma.

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  5. Me caüen diez, pero que bruto era ese hombre, os daba con el canto de la regla en la cabeza ¡ hay que fastidiarse! Estos posfranquistas, tenían tanto miedo que su cobardía la canalizaban pegando a los niños, así autoafirmaban su autoridad, ante ellos mismos y los representantes del régmen en el pueblo.
    ¡¡Qué diferente al lenguaje de las mariposas !!!
    Lo que dice Diana, es verdad, hoy los chavales eliminan la autoridad al maestro Y LOS PADRES -casi todos- LES APLAUDEN. Es la ley del péndulo, ya se guardará el equilibrio; eso sspero porque si no vamos guapos, la sociedad que se está construyendo.

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  6. A ver si es verdad que se equilibran las cosas, pues de lo contrario estamos apañados.

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  7. Que sorpresa volver a escuchar a Patxi Andión...esa voz tan personal y esas letras combativas llenas de rabia y de ternura... Muy bueno el montaje con imágenes de ese personaje inolvidable. Afortunadamente mis recuerdos del colegio no son tan traumáticos, aunque me hubiera gustado que las cosas hubiesen sido de otra forma. Es el tiempo que nos tocó vivir.

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  8. Pienso que Patxi Andión no ha tenido el reconocimiento que se merece, a mi siempre me gustó.
    Tambien a mi me hubiera gustado que las escuela fuera de otra manera,tendremos que pensar que por lo menos hemos contribuido a que las cosas hayan cambiado.
    Un saludo.

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  9. Cuando buscamos en el fondo de la memoria, salen a relucir antes los buenos momentos y las grandes personas que te han dejado huella.
    Recuerdo grandes profesores que me enseñaron a PENSAR, a ver más allá y sentir que hay muchas formas de interpretación y de ver la vida.
    Ahora, parece que no tenemos tiempo para hablar sin prisas, para mirarnos a los ojos,...
    La peli de La lengua de las mariposas es genial.
    Un abrazo.

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  10. Hola José Antonio,me alegro que tengas mejores recuerdos que yo, ya me habría gustado a mi tener un maestro como el de La lengua de las mariposas,que aunque triste es una gran película.
    Un abrazo.

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