19/11/16

VERDE PASIEGO

La tarde era fría como el agua del desnieve que se precipitaba ladera abajo buscando el cauce del río Miera.

Las nubes amenazantes y el sol  escondiéndose tras montañas más lejanas, con sus últimos rayos quería dar un poco de calor al Puerto de Lunada.

 "Este año ha venido muy temprano la nieve y he tenido que poner al mi dueño a picar leña"

¿Vosotros no sabréis de algún madrileño caprichoso, de esos que vienen en verano y les gusta tanto esto que quiera comprar  alguna cabaña?.

¿La casa vividora también está en venta?.

También, pensábamos que   no íbamos a pasar aquí más inviernos,-ya son demasiados-, y cada vez quedamos menos, tengo setenta y tres años y los huesos muy jeringados.

Hemos vendido casi todas las vacas, solo queda lo que veis, una para la leche, el mico que ya ni ladra ni avisa y las gallinas que picotean por el prado.


El mico, un perro manso y azorrado, con el rabo entre las piernas, apenas se ha atrevido a olisquearnos, se ve tan viejo que con un solo ladrido ya parece cansado.

Nos ignora, se da la vuelta y se tumba en el prado, pero debe estar muy frío pues se levanta y emprende camino de vuelta hasta la casa.
 Ha visto salir el humo por el tejado y marcha en busca  del calor de la lumbre.  
Lo mismo que su dueña, que pasará  un invierno más tejiendo mantas.
 Con la lana que le sobre de los ovillos se hará otro gorro de mil colores, como el que lleva en la cabeza.

50 comentarios:

  1. Una preciosidad de fotos, hermosas.

    ResponderEliminar
  2. cuanto arte encierran tus ojos cuando sacas las fotos

    ResponderEliminar

  3. ¿Así que Lunada arriba? ¿no está cerrado?
    Fotos fantásticas, maestro. Estás que te sales.
    El texto resulta casi poético, un canto a esas cuatro almas que sobreviven en las duras condiciones que dan las cabañas pasiegas, vividora... que palabra más bonita.

    abrazos TyT

    · LMA · & · CR ·

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. O Lunada abajo,según se mire.
      Subimos por el Alto del Caracol desde Selaya y llegando a la cumbre a la derecha tomas un desvío que te lleva hasta la carretera que te lleva a Lunada pasando por unos parajes muy fotográficos.
      Un abrazo.

      Eliminar
  4. Buenas fotografías de esos valles pasiegos, parece un buen lugar que visitar y entre tus fotos y un vídeo que vi me esta picando el gusanillo.

    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues nada,Tomás, anímate y date una vuelta que tan lejos no lo tienes.
      Un saludo.

      Eliminar
  5. Son fotos para soñar, que bonito es Santander, yo seguro que tome algo y me dejo anulada la cabeza y perdi el norte nunca mejor dicho
    besos

    ResponderEliminar
  6. Es un lugar ideal para disfrutar de la Naturaleza y deleitarse con la belleza de este lugar,a ún no he podido ir por ahí y por ahora me tengo que contentar con contemparlo por medio de tus bellas imágenes.

    Besos

    ResponderEliminar
  7. Las fotos son muy chulas, Tejón, enseñan toda la belleza y toda la desolación.

    A mí también me ha gustado mucho eso de casa vividora, como si la que viviera fuera ella, que de alguna manera si, porque viven hasta que dejamos de habitarlas.


    Un beso. Otro para Mila

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Las llaman así,Vega, cabañas vividoras, porque verdaderamente ellas también viven mientras están ocupadas, después es una pena ver como se hunden los tejados.
      Un abrazo.

      Eliminar
  8. Preciosos paisajes. Dan ganas de darse una vuelta por ahí y admirar tanta maravilla natural.
    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias,Pini, si te animas hazlo abrigado que ha vuelto a nevar.
      Un saludo.

      Eliminar
  9. Una maravilla de fotos y los sentimientos que acompañan. Besetes.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por pasar, trimbolera.
      Un saludo y vuelve pronto.

      Eliminar
  10. La dueña me recuerda a mí, por eso de pasar el invierno tejiendo mantas de lana...

    Una maravilla de lugar que pocos son los que lo viven todo el año, pocos son los que prueban la rudeza su invierno...

    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias,Nieves.
      Si le pides a los Magos de Oriente una manta de lana también te la traerán, así no tienes que hacerla.
      Un beso.

      Eliminar
  11. Encantador todo y que bien aclarado que la vida y el invierno en la montaña son muy duros.
    Saludos!

    ResponderEliminar
  12. Un lugar magnífico que captaste en un momento en que el sol, por entre nubes grises, dejaba su oro en las cumbres.
    La del perro y la mujer en el camino son de una soledad absoluta.
    Felicitaciones, Jesús.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  13. Qué buena entrada, Tejón. Sí, es así: a veces los "paraísos" esconden tantas dificultades... Vivimos en una época de servicios y a veces hasta a los servicios más básicos les cuesta llegar a según qué sitios. ¿Y entonces? Pues la gente se va. Y el paraíso queda abandonado a su suerte.
    Un abrazo, amigo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y por eso nos gusta volver, para dar un poco de vida a esos paraísos.
      Un abrazo.

      Eliminar
  14. ¡Qué difícil se hace la vida en algunos lugares! Poco a poco se despueblan para buscar cobijos más agradables aunque los mayores no abandonan, quedarían desarraigados. Bellas fotos y triste texto.
    Salu2

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me impregné de su tristeza y así resultó el texto,Juan Carlos.
      Un abrazo.

      Eliminar
  15. Que emoción, tejón. De esas cosas que se guardan, es esta entrada, en los cofres donde se guardan los tesoros, los que enseñas a pocos, muy pocos. Y pocos son los tesoros, también.

    Sólo hay un verde que sea verde, y es éste. Por allí he estado yo, buscándome. Y me vi, pero no quise encontrarme del todo, para poder volver a buscarme allí, algún día.
    Y sólo aspiro a ser el mico; un perro viejo y cansado de mirar el verde pasiego, que cuando nota el frío de la hierba en las costillas se levanta quejoso, y se va a casa a buscar la lumbre.

    Muchas gracias....mil besos, Jesús, Mila...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estaba haciendo las fotos pensando en la entrada y en tu comentario porque te vi corriendo por los verdes prados.
      Un abrazo grande,Moni.

      Eliminar
  16. Qué dura es la vida en estos lugares, sobre todo porque la gente se va quedando sola, aunque sean lugares únicos y unos paisajes espléndidos, hay mucha soledad.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias,Valverde, la vida en estos pueblos es bastante parecida a esos otros lugares y otros pueblos que tan bien conoces y nos enseñas.
      Un abrazo.

      Eliminar
  17. Nuestros rincones se van quedando más y más callados...
    Qué pena tan grande, para aquellos que los conocemos y queremos...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Alguien tendría que poner voz y eco a esos pueblos.
      Un saludo.

      Eliminar
  18. Impresionantes las fotos, de verdad, son pura maravilla.

    Abrazo.

    ResponderEliminar
  19. Que verde es nuestra tierruca, somos unos privilegiados. Un abrazo desde Castro.

    ResponderEliminar
  20. Impresiona tanta belleza y a la vez tanta soledad. Cuanto habrá visto esa casa vividora que ahora está tan solitaria. Las cumbres están preciosas con el sol acostandose en ellas.
    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias,Laura, ese sol que cae tan bajo que ya no calienta, parece que da más frío a las cabañas.
      Un abrazo.

      Eliminar
  21. Que grande es esa tierra que tu me mostraste, esos rincones de un verde diferente a todos los verdes que como tu bien dices es pasiego, porque solo lo encuentras ahí.... y que gentes, aún recuerdo la conversación que mantuvimos con aquel hombre cuando bajábamos sobre los incendios y su encogimiento.. saber de sobra sabía quien había sido, dura la vida de esa gente, precioso tu artículo Jesús, inundando de ese verde pasiego....

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y que tanto me agrada haberte enseñado,Carlos. Ya os toca volver.
      Un abrazo.

      Eliminar
  22. Las fotos, una pasada, preciosas ... una pena que queden desiertos lugares tan preciosos

    Abrazos

    ResponderEliminar
  23. Das suas lentes saem imagens tão simples e ao mesmo tempo tão românticas e preciosas... gosto do que você escreve e do que vive por entre a natureza imensamente bela do seu país...
    Um beijo, Jesús

    ResponderEliminar
  24. He tenido que viajar mucho por Cantabria por temas laborales. Y pisar mucho monte, también por temas laborales. Y si me tuviera que quedar con una zona - exceptuando Liébana -, seguramente sería con los valles pasiegos. Una preciosidad de zona. Y lo bien que comimos siempre por allí. Recuerdo la primera vez que vi un cartel que decia "Se vende vividora". Creí que era una que se daba a la buena vida, ja, ja.
    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja, las pasiegas son muy trabajadoras, Cienfuegos, creo que lo habrás visto. Lo de que se come bien también está comprobado.
      Gracias por pasar y comentar.
      Un saludo.

      Eliminar
  25. Bom dia, as fotos são lindas, revelam a bela natureza a embeleza todas a zona.
    Continuação de boa semana,
    AG

    ResponderEliminar