¿Qué se puede decir de la montaña que amas cuando se viste de verde esperando el blanco de la nieve?.
¿Qué se puede decir de la montaña que amas, que forja sueños y amistades, donde te habla hasta el viento?.
¿Qué se puede decir de la montaña que amas cuando señalas su cima con el dedo y se te corta hasta el aliento?.
Castro Valnera, la montaña que amo.
Y tienes motivo para amarla es espectacular; vaya belleza.
ResponderEliminarAbrazo Jesús Ángel.
Espectacular Jesús Angel. Un abrazo.
ResponderEliminarQue bonitas palabras para esa inmensidad !!!
ResponderEliminarTodo un espectáculo
Amar la montaña es amar la vida
abrazos
No me extraña que la ames, acabo de verla y me ha dejado atrapada por su espectacular belleza.
ResponderEliminarBesos
Uau! Jesús, até eu amo essa montanha à distância! Paisagem mais linda, extremamente artística! E que céu tao azul!!!!
ResponderEliminarUm beijo
Imagino que no se trata de decir, sino de sentir
ResponderEliminarEs casi mágica Jesús :)
Besitos
Todos tenemos una montaña que amamos independientemente de sus razones, de las razones que nos han llevado a amarla, tú ya sabes bien cual es la mía... precioso ese Castro Valnera, tu me enseñaste el pie de ella... muy hermosa. Saludos amigo.
ResponderEliminarPreciosa declaração, amigo Carlos!...
EliminarUm beijo, saúde e montanha
La montaña que amas, lo dices por quedar bien con las otras, ¿verdad?
ResponderEliminarbesos
La montaña de lejos la puedes apreciar, Pero no es hasta que la ves de cerca que te enamora aunque te diga acércate con respeto.
ResponderEliminarSaludos.
Cómo no amarla si llena los ojos con su grandeza.
ResponderEliminarSaludos, Jesús.
Normal que la ames y que no necesites decir nada. Sólo con verla, se entiende todo lo que es capaz de transmitir tan hermoso paisaje.
ResponderEliminarsaludos
Magnífica, impresionante... Cómo nos empequeñece.
ResponderEliminarPues no cabe decir nada, sobran las palabras cuando es el viento el que habla en el Castro Valnera
ResponderEliminarEsta sí que la conozco...A ésta sí que la amo, también;)
Como a Mila y a tí:)
El viento helado en el rostro, el olor a pinos y sudor, las trochas áridas de piedra suelta bajo los pies, la cima que cada vez parece más cercana, el sol abrasador y la sensación de frío a la vez, la escarcha rompiéndose a cada paso, las fuentes de aguas claras y heladas, las vistas que cortan la respiración... ¡Cuántas sensaciones!
ResponderEliminarUn saludo
Por todo eso la quieres tanto. Pura belleza !!!
ResponderEliminarBesos.
Quita el aliento y da la calma.
ResponderEliminar...y como para no amarla, Castro Valnera es una auténtica maravilla, y todo un reto cuando eramos chavales. La foto es fantástica, un abrazo desde Castro, pero el de la mar.
ResponderEliminarMuchas gracias a todos por vuestros comentarios.
ResponderEliminarEstoy convencido que todos tenéis una montaña de referencia a la que amáis tanto como yo amo a mi Castro Valnera.
·.
ResponderEliminarLa montaña que amamos... las montañas que amamos... todas, pero el Castro Valnera es especial, la subas por dónde la subas, o con la nieve a sus pies. Y especiales son sus vistas... todo lo que se ve cobra otro significado.
Y volveré alguna vez más.
La foto... espectacular.
un abrazo TyT
· LMA · & · CR ·
Boa tarde, em todos nós existe uma montanha que ambicionamos em conquistar, a foto é maravilhosa e significativa.
ResponderEliminarAG
Preciosamente espectacular, impresionantemente bonita!!! No se si quisiste escribir, la montaña que amo 1º o la montaña que amo (yo/I en inglés ; ) da igual jaja disculpa mis tonteríaS.. buen finde entre montañas!!!
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