Hay días en los que me encuentro un poco espeso, quiero publicar y no se me ocurre nada y de repente me acuerdo de una fotos que aunque no sean muy buenas merecen ser enseñadas, como lo merecen los lugares que hoy os quiero enseñar.
Seguramente muchos habréis oído hablar de La Villa Romana de "La Olmeda" en Palencia, de sus mosaicos, de su historia y de Javier Cortés Álvarez de Miranda, dueño y descubridor de las tierras que generosamente donó a la Diputación palentina para que se encargara de su acondicionamiento y pudiesen ser visitadas y disfrutadas las maravillas que se encontraban bajo la tierra que sembraba.
El yacimiento fue declarado Bien de Interés Cultural el 3 de abril de 1966 y desde abril de 2009 está abierto al publico.
Su visita no deja indiferente a nadie, es digno de ver como hasta niños de corta edad quedan atrapados por los colores de sus mosaicos, las escenas de caza, la fantasía y la magia que se respira en el recinto hacen que uno siente como si retrocediera siglos atrás.
De la minuciosidad con que fue hecha la excavación queda reflejada en esta foto donde se aprecia perfectamente lo que era terreno de siembra y lo que se escondía debajo de la tierra....
......termas, baños, avanzados sistemas de calefacción, desagües y alcantarillado, perfectas obras de ingeniería.
Muestra de que forma y manera se construían y de como se partían las piedras de colores que dan forma a los complicados mosaicos.
Objetos de mármol traído de las mejores canteras de Italia y numerosa cerámica y otros restos forman parte de una valiosa colección.
De todo ello, de como llegar, los horarios de visitas y mucho más podéis encontrar amplia información en este enlace.
Y muy cerca de La Olmeda se encuentra Saldaña, un precioso pueblo castellano cargado de historia, con casonas blasonadas....
...una de las plazas más bonitas que he visto nunca con unos preciosos soportales de madera.....
...que sujetan sencillos balcones llenos de floridas macetas...
....y viejas puertas de madera y forja a las que dan ganas de llamar para ver quien se asoma por la mirilla y poder escudriñar y ver que secretos se guardan en su interior.
Estos escudos pertenecen a una de las construcciones civiles más importantes de Saldaña, una casa solariega cuyo origen se remonta al siglo XV y que pertenece a los marqueses de Valdivia.
No es mala época para hacer una visita a estos lugares ahora que van remitiendo los calores del verano, el día que fui yo no hacía como para estar sentado en una terraza y tomar el sol.