24/1/17

¿SERÁN FELICES?

Un poco antes de que la humanidad existiera, se reunieron varios duendes, para hacer una travesura. Uno de ellos dijo:

- Debemos quitarles algo a los seres humanos, pero, ¿qué?

Después de mucho pensar, uno dijo:

- ¡Ya sé! Vamos a quitarles la felicidad. El problema es dónde esconderla para que no puedan encontrarla.

Propuso el primero:

- Vamos a esconderla en la cima del monte más alto del mundo.

- No, recuerda que tienen fuerza; alguno podría subir y encontrarla, y si la encuentra uno, ya todos sabrán dónde está -replicó otro.

Se escuchó una nueva propuesta:

- Entonces vamos a esconderla en el fondo del mar.

Otro señaló:

- No, no olvides que son curiosos, alguno podría construir un aparato para bajar, y entonces la encontrarán.

- Escondámosla en un planeta bien lejano de la Tierra -propuso otro.

- No -le dijeron. Recuerda que les dieron inteligencia, y un día alguno va a construir una nave para viajar a otros planetas y la va a descubrir, y entonces todos tendrán felicidad.

El duende más veterano, que había permanecido en silencio escuchando atentamente cada una de las propuestas, dijo:

- Creo saber dónde ponerla para que nunca la encuentren.

Todos voltearon asombrados y preguntaron al unísono:

- ¿Dónde?

- La esconderemos dentro de ellos mismos; estarán tan ocupados buscándola afuera que nunca la encontrarán.

Todos estuvieron de acuerdo, y desde entonces ha sido así: el hombre se pasa la vida buscando la felicidad sin saber que la lleva consigo.

No me pregunteis donde encontré este cuento. Hice a San Google la pregunta que da título a la entrada, apareció... y lo copié.
Cosa de duendes

11/1/17

LA VIJANERA II

  AQUÍ veréis la entrada que de La Vijanera hice el año 2012 y no me repito en dar más detalles de lo que significa y los orígenes ancestrales del primer carnaval del año.

Lo mismo que hace cinco años madrugamos para ir hasta Silió en una fría y helada mañana de Enero. 
No fuimos los primeros pues desde temprana hora ya había gente en primera fila y bien acomodados esperando a que comenzara el espectaculo.
No se que pasaría en la noche, la movida debió ser gorda, a Tramp le debió sentar mal el orujo y acabó al sereno, colgando de una farola.
Los protagonistas del carnaval también madrugaron para ir vistiendo los trajes más elegantes que podéis imaginar.
Con gran expectación y miles de personas esperando pacientemente, empiezan a aparecer por los bosques los más de ciento setenta actores del carnaval.
 Es el árbol uno de los disfraces más vistoso y llamativo y más difícil de fotografiar.
 Esta vez lo conseguí cuando apenas había empezado a caminar por el bosque confundiéndose con los robles, los castaños y los abedules.   
Guapisimos los Zarramacos con sus pieles, sus campanos y sus gorros con cascabeles. 
Trapajones de todo tipo vestidos con trajes confeccionados con elementos naturales, hojas de laurel...
...hojas de maíz y erizos de las castañas...
...y el "mugosu" cubierto de musgo y de hiedra, uno de los disfraces más axfisiante y agotador junto a el Ojáncano y la Ojáncana representan a la mitología cántabra. 
 El oso que es el protagonista principal que termina preso, agotado y molido a palos.
Aunque represente al mal  hay cosas que me asustan más.
Y por las calles del pueblo, haciendo reír a todo el mundo con sus coplas y su buen humor un montón de personajes representando numerosos oficios como el afilador, los guardias civiles, los marineritos, el sacamuelas, la preñá, todos ellos realizando distintas funciones sociales, escenificando y parodiando  los sucesos más comentados del año pasado.
Otro de los personajes cada año más fotografiado es este veterano Zarramaco que junto a la Giraldona refleja ya el cansancio en su rostro.

 Os dejo alguna de las coplas que se escucharon.

Para acoger refugiados
Europa diz que "no hay perras"
mientras gastan los millones
en bombardear sus tierras.

Corriendo tras los balones
van esquivando listas
y en realidad son ladrones
vestidos de futbolistas.

Pa promocionar Cantabria
en el año lebaniego
traeremos a Enrique Iglesias
a cantar al sardinero.

De Reinosa a Torrelavega
ya no hay donde trabajar
o te agarras fuerte a un ERE
o te aguantas sin cobrar.

Todavía resuenan en mis oídos los campanos.

VIVA  LA VIJANERA Y VIVA SILIÓ.

4/1/17

MAZCUERRAS

Esta entrada que hago hoy es la primera de este año recién comenzado.
 Me encontraba yo un poco espeso, vago, como amodorrado, sin ideas y con tentaciones de dar pausa durante una temporada al blog.
Las comidas y cenas sin medida de estas fechas causan mella y una tarde fría decidimos salir a dar una vuelta para mover un poco la barriga.
Sin rumbo fijo tomamos dirección al Valle de Cabuérniga y al pasar por Mazcuerras, (un bello pueblo de Cantabria de esos que siempre  dejas a un lado ) nos sorprenden una fotos pegadas a las viejas casonas de piedra.
 Mazcuerras es el pueblo natal de la escritora Concha Espina y fue el lugar donde pasó también los últimos años de su vida la escritora leonesa, mi admirada Josefina Aldecoa.
Este pueblo es muy conocido por unos viveros de plantas de larga tradición familiar que han ido creciendo desde su fundación en el año de 1894.

Pocos jardines y huertas habrá en Cantabria que no tengan alguna planta o algún árbol de los Viveros Escalante de Mazcuerras.
Cuenta Mazcuerras con una gran actividad cultural durante los veranos.

 Gracias a sus asociaciones de vecinos y de mujeres, ayudados por la Junta Vecinal sus calles se han convertido en un museo permanente donde se pueden ver esculturas de distintos autores y materiales.
Destacable es la labor de José Antonio Andrés Vera, el "médico escultor" y a quién todos los vecinos conocen bien pues es su médico y el autor de alguna de las esculturas que se exponen.
De él fue también la idea de pedir a sus vecinos fotografías antiguas que tuvieran en sus casas y él se encargó de exponerlas, una vez silueteadas en los muros y en las calles a los que estuvieron vinculados dichas personas
Treinta y seis fotografías, algunas con más de cien años de antigüedad que parece que han devuelto a la vida a sus protagonistas y que han vuelto a pasear por estas calles.
El orondo cura sigue velando por la salud espiritual de sus feligreses...
...la bella panderetera parece soñar con un novio o una pandereta nueva...
Familias modestas...
...y gente de abolengo.
Me gustó tanto la exposición que no he podido resistir la tentación de enseñaros alguna de las fotos que saqué.
Todas y cada una de ellas sugieren historias y momentos de un pasado no tan lejano.
Si os ha gustado la entrada me alegraré, y desde aquí os animo a visitar Mazcuerras y pasear sus calles si alguna vez tenéis ocasión de hacerlo.
Un pueblo con mucho arte.