...son sobrios, beben agua. Duermen en el suelo y llevan el pelo largo como las mujeres, atándoselo en la frente con una cinta para el combate. Comen generalmente carne de macho cabrío y sacrifican a Ares uno de ellos, y también caballos. Realizan hecatombes de cada especie al modo griego, tal como dice Píndaro:"de todo sacrifican un número de cien". Hacen competiciones gimnásticas, militares y de carreras de caballos, con pugilatos y combates. Los montañeses se alimentan de bellotas la mitad del año, secándolas y triturandolas. Después las muelen y fabrican pan con la masa para conservarla largo tiempo. También beben cerveza. El vino en cambio escasea y, cuando lo consiguen, lo consumen al punto en fiestas familiares. En lugar de aceite usan manteca. Comen sentados en poyos construidos en torno a las paredes, guardándose sitios de acuerdo con la honra y posición social. Las comidas se sirven en circulo y mientras beben bailan en corros al son de flautas y trompetas, saltando y poniéndose en cuclillas. Todos visten generalmente sayos negros, con los que también se acuestan sobre camas de paja. Utilizan vasos de madera, como los celtas. Las mujeres usan enaguas y vestidos bordados de flores (...)
Así es la vida de estos montañeses, que, como dije, son los que habitan en el lado septentrional de Iberia...
(ESTRABON, Geographika,III, 3,7)
La foto está sacada desde el Pico Tres Mares, bajo esas nubes y Los Picos de Europa que se ven al fondo siguen viviendo los montañeses que describe el griego.
Un momento lúdico, cargado de magia, extasiado bajé de allí.